Bienvenidos a un nuevo año lectivo 2018
El equipo docente de la Escuela N° 88 les da a las niñas,
niños y familias una cálida bienvenida a un nuevo año lectivo. Para ello compartimos
con ustedes estas significativas observaciones y reflexiones de la doctora
Natalia Trenchi:
"Armando las mochilas de
adentro" (NATALIA TRENCHI)
Ahí andan
todos en estos días: comprando materiales, probando túnicas y uniformes y
asegurándose de que está todo pronto para encarar un nuevo año escolar. Y en
pocos días veremos a los chiquilines cargando pesadas mochilas, con una mezcla
variada de entusiasmo, disgusto, curiosidad y nostalgia de las
vacaciones.
Lo que
muchos no tienen muy presente es que lo más importante que tenemos que ofrecerles
para esta etapa no son ni los libros ni los cuadernos bien forrados ni el
dobladillo prolijo. Lo crucial es que encaren la etapa escolar y liceal con un
cerebro sano y en paz, motivado para aprender y cargado con algunas capacidades
básicas. Porque ahí es que se va a jugar el verdadero partido.
Cuando un
chico se sienta en su pupitre o en la silla en el aula, lleva consigo todas sus
experiencias pasadas y lleva su impronta familiar, su cultura y sus creencias.
Mucho más que su cociente intelectual, es todo eso que trae puesto lo que va a
marcar la diferencia.
Asegúrense
de tener en cuenta:
- Que
coma bien: si llega al aula mal alimentado (y no sólo por carencias económicas
sino por malas costumbres) le va a faltar el combustible necesario.
- Que
duerma bien: si llega al aula sin haber tenido un buen sueño en cantidad y
calidad, va a aprender menos y peor. Los chicos necesitan muchas horas de buen
sueño nocturno, por lo cual deben acostarse temprano y dormirse tranquilos, en
silencio y sin tecnología cerca.
- Que
esté razonablemente tranquilo: que no caiga sobre él información innecesaria y
estresante, y que no sea depositario de conflictos de adultos.
- Que
tenga desarrollada la autonomía adecuada para su edad, lo que significa que esté
acostumbrado a hacer por sí mismo lo que pueda hacer y que no espere que los
demás hagan todo por él.
- Que
vaya al aula confiando en sí mismo. Eso sucede cuando se tienen madres y
padres que son más estimulantes que críticos, y que le saben valorar por su
esfuerzo y avance.
- Que
vaya al aula confiando en los maestros, porque sólo así va a poder ser
receptivo a lo que ellos le ofrezcan. Esto depende en buena medida de la
confianza que sus padres sientan por la docente, y la institución escolar y que
lo trasmitan con y sin palabras.
- Que
haya desarrollado tolerancia a la frustración: aprender de verdad implica
siempre toparse con obstáculos, equivocarse y tener que volver a intentar. Si
sólo saben hacer lo que les resulta fácil, tarde o temprano van a encallar.
- Que
hayan desarrollado una capacidad para esforzarse y responsabilidad por sus
acciones, lo que significa que no interpretan el esfuerzo como un castigo sino
como una manera de llegar a donde se quiere llegar, y que además han aprendido
algo muy importante: de lo que hacemos depende el resultado, nosotros somos los
artífices. Para eso, deben haber tenido madres y padres que les han permitido
pelearla y que no corren a solucionarles todos los problemas.
- Que
esté acostumbrado a respetar naturalmente las reglas, lo que le va a asegurar
una inserción mucho más sana en esta primer microsociedad que encuentra fuera
de su familia.
- Que se
respete a sí mismo y a los demás, y que sepa defender sus derechos sin
violencia.
- Que
vayan dispuestos a conocer la maravillosa diversidad que nos ofrece la
naturaleza y que sepan darse la oportunidad de conocer a quienes parecen
diferentes.
- Que
encaren el aprendizaje con entusiasmo y esperanza, porque sus padres le
transmiten el gusto por el conocimiento y la certeza de que ese es el camino
para desarrollarse en la vida.
Y si
además ustedes, madres y padres, logran organizarse bien para no andar siempre
a las corridas y con el ceño fruncido, si logran aprovechar el tiempo que tienen
para estar juntos para vivir, sin dejar que la escuela invada cada hora de la
vida de los chicos y la familia…este será un gran año.
¡Esperamos tener un gran año!
Equipo
Docente de la Escuela N° 88